En 2019, introdujimos nuestros productos en formato refrigerado, pasando de congelados. En 2020, cambiamos a un empaque de cartón con un sello de plástico para nuestros productos refrigerados, con el objetivo de mejorar nuestros esfuerzos de sostenibilidad. Sin embargo, después de consultar con especialistas, nos dimos cuenta de que nuestro empaque no era tan sostenible como parecía. Para tomar decisiones basadas en datos, contratamos a un estudio estratégico de eco-innovación para comparar nuestro envase con varios materiales basados en datos fiables e independientes.
El cambio de 2020 a 2021 redujo las emisiones de CO2 en un 40%, el uso de combustibles fósiles en un 50% y el consumo de agua del empaque en un 14%. Pero nunca nos conformamos y, después de menos de tres años, estamos presentando un nuevo formato que hace obsoleto al anterior.
- Embalaje 92% rPET: Fabricado principalmente con plástico reciclado, es 100% reciclable.
- Film de plástico reforzado: Para proteger al máximo el contenido y reducir así el desperdicio alimentario.
- Sin faja de cartón: Imprimimos directamente sobre el embalaje y reducimos así un 30% los materiales utilizados.